Nuestro primer destino es la Cueva de la Pileta, un tesoro escondido en las entrañas de la tierra que alberga pinturas rupestres de hace miles de años. Guiados por expertos, recorreremos sus pasajes y admiraremos las obras de arte dejadas por nuestros ancestros, conectando con su legado y la magia de este lugar místico.

Continuamos nuestro camino hacia la Cueva del Gato, donde la naturaleza nos regala un espectáculo impresionante. Un manantial de aguas cristalinas brota de la montaña, creando un oasis de frescor y belleza. Podemos refrescarnos en sus pozas y disfrutar del entorno natural que nos rodea.

Al caer la tarde, nos dirigimos al restaurante Molino Santo Justo, ubicado junto al Nacimiento de la Estación en Benaoján. Allí degustaremos un delicioso almuerzo típico de la región, elaborado con productos frescos y de la más alta calidad.

Tras la comida, nos dejamos llevar por las callejuelas empedradas de Ronda. La ciudad nos envuelve con su encanto medieval y nos invita a descubrir sus tesoros: el famoso Tajo, el Puente Nuevo, la Plaza de Toros y muchos otros rincones emblemáticos.